Página 98 - libro carla

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cortaba la cola al gatito se iba a descuerar entero y por esa causa
iba a morir.
Cuando la señora llevó al gatito a la escuela los demás gatos de
burlaban de él y un día el gatito le conto a su mamá lo que le
sucedía y la Sra. Amelia fue a hablar con los demás y le dijo que
su hijo había querido cortarse la cola para no ser igual que los
demás porque todos los gatos eran del mismo color en esa
escuela y su hijo le gustaba ser único no como los demás.
Desde ese día los gatitos quisieron cortarse el las orejas otro se
cortó un pedazo en la oreja otro se cortó los bigotes.
El caso es que ningún gatito era parecido al otro y se pusieron
hasta ropa y otros eran parecidos por fuera pero no andadan con
la misma ropa como antes.
Los profesores también siguieron su ejemplo y ninguno se
parecía al otro ni siquiera si eran hermanos o gemelos.
Desde ese día y gracias a el gatito sin cola ninguna era igual a
otro y todos tenían su propio estilo.
Y hasta le hicieron una estatua a el gatito sin cola por inventar la
creativa idea de ser diferente.
FIN
El malvado Chuky
Esta era una vez en un circo en donde había un viejo hechicero que no
era malo sino bueno.
Un día recibió un viejo payaso que no era buena persona porque había
matado 45 personas y no se cansaba además era ladrón y secuestraba
abuelitos y niños, el payaso se llamaba Joaquín y este tenía tan solo 15
año y por eso no estaba preso.
Al día siguiente, al hechicero que estaba inválido le escondía la silla de
ruedas y lo empujó al agua para que se muriera de frío, porque sabía que
al día siguiente iba a nevar.
El hechicero se hizo alas y convirtió a Joaquín en muñeco y el quiso que
le digan Chuky.
Después de hacer esto el muñeco robaba más, y mató a 258 personas en
un día, realmente era muy malo y no le podían disparar porque era de
palo.
Un día Chuky fue a robar a un banco, y en el banco Santander, en ese
banco había mucha plata por eso se fue ahí y como los guardias no
podían dispararle él podía hacer lo que quisiera, los guardias estaban