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El conejito sin orejas
Esta era una vez una señora que vivía sola en una casa cerca del río, esta
señora se llamaba Marisol y tenía 85 años aunque parecía de 50. Nadie le creía
su edad pero era cierto y sus padres la anotaron en el registro civil cuando era
bebé y tenía muchas pruebas de eso. Pero eso no venia al caso, resulta que la
señora Marisol no vivía sola sino que con su mascota que era un conejo de
adentro la casa y afuera tenia patos y perros.
Su conejo “Picarón” que así lo llamaban todos, resulta que un día Picarón
tratando de hacerle un broma a los patos y se hizo pasar por tigre pero las
patos se asustaron y se fueron pero no fue por él sino que por el tigre que
estaba detrás de él, al darse cuenta de la presencia del tigre arrancó pero él
tigre trató de pillarlo y se lo pescó de las orejas y como Picarón se tiró se las
arrancó.
Y desde ese día que Picarón es un conejito sin orejas, aunque no se las arrancó
de raíz por eso es que todavía puede oír.
Desde ese día que la señora Marisol tiene a Picarón dentro de casa para que
no se meta en problemas de nuevo y ponga en peligro su vida.
Pero desde que el tigre le cortó las orejas, Picarón se quiere puro vengar pero
no encuentra como.
Un día paseando por el patío vio una armadura de caballero de su medida y
era firme pero no pesada así es que cada vez que sale a la laguna a ver a las
patas la lleva puesta debajo de su ropa.
Resulta que un día cuando estaba en la laguna junto a las patas, estas
arrancaron y después de un rato de pensar se dio cuenta de que el tigre estaba
nuevamente detrás de él pero esta vez no huyó como los cobardes y cuando
tigre estaba abriendo la boca para comérselo este le dio una patada en la boca
y el tigre dio un enorme grito pero ni por eso despertó al perro ni a la señora
Marisol.
Y Picarón tuvo que huir pero no pudo huir a ninguna otra parte sino que al
bosque la casa del tigre.
Después de perseguirlo un rato el tigre se cansó y dio un salto y atrapó a
picarón y se lo echó todo a la boca, parecía que de esta no se iba a escapar
Picarón pero sí, porque el tigre dio un gran mordisco y como Picarón andaba
trayendo debajo de su ropa la armadura, al tigre se le cayeron todos los
dientes, y por eso ya nunca más pudo cazar animales indefensos y se murió de
hambre.